Ante los reiterados incumplimientos contractuales de la empresa concesionaria del servicio de limpieza viaria de Colmenar, CESPA, el gobierno municipal del Partido Popular sigue pagando los 296.000€ mensuales estipulados por el servicio, lo que implica consentir dichas vulneraciones. El PSOE intentó durante un año que se exigiese a CESPA realizar los servicios contratados y al fracasar en el intento, decidió llevar el asunto al Tribunal de Cuentas.
El día 26 de mayo de 2016 se retiró dicha denuncia con la intención de buscar una solución extrajudicial. Como resultado de esta actuación, el Tribunal de Cuentas archiva la causa. Es importante destacar que en caso de que dicho tribunal hubiera considerado que no había causa, la habría archivado en fases previas.
El contrato de limpieza tiene una vigencia de ocho años prorrogable por otros cuatro. En julio pasado y cuando quedaban tres años de posibles prórrogas, se decide dar por finalizado el contrato, momento que coincide “casualmente” con una comunicación del Tribunal de Cuentas en la que se indica que sigue la causa. ¿Coincidencia o preocupación del equipo de gobierno ante lo que pudiera opinar el Tribunal?
Habitualmente una licitación de contrato no lleva más de seis meses. Llevamos dieciocho meses esperando lo nuevo pliegos y CESPA sigue incumpliendo. Es evidente que hacen falta explicaciones.
Con la intención de buscar un buen acuerdo extrajudicial, el mes de mayo propusimos a D. Miguel Ángel Santamaría mantener una reunión con las autoridades de CESPA. Nuestro objetivo era buscar un resarcimiento económico por los servicios no cumplidos. En el momento que el Sr. Santamaría nos confirmó la reunión con CESPA, el PSOE retiró la demanda ante el Tribunal de Cuentas.
A la reunión citada asistieron el entonces Alcalde, dos ejecutivos de CESPA y tres miembros del PSOE. CESPA negó todos los cargos, afirmó cumplir todo lo establecido en el contrato, por lo que no se llegó a ningún acuerdo.
Ante esta situación y los importantes incumplimientos, el pasado 30 de septiembre llevamos la denuncia ante la Fiscalía, la cual ya se encuentra investigando.
Tenemos que felicitarnos, ya que los incumplimientos denunciados ahora si son compartidos por otros grupos de la oposición.
Para una adecuada comprensión de la demanda presentada, la síntesis de alguno de los incumplimientos denunciados:
• Limpieza de calles. El servicio contratado por el Ayuntamiento, y por el que se paga, es el barrido manual de todas las calles del pueblo, seis días por semana, excepto en las urbanizaciones de la periferia donde la frecuencia debería de ser tres días por semana. El nivel de calidad debería ser tal que no permitiese la existencia de hierbas o hierbajos en las mismas. Esto está demostrado que no se cumple y dando un paseo por las calles es fácil acreditarlo.
• Limpieza de cacas de perros. Al inicio de la ejecución del contrato con CESPA a lo largo del pueblo estaban instalados sanecanes, especie de papelera que sirve para dispensar bolsas para recogida de cacas de perros y depósito para almacenarlas, y de acuerdo al citado contrato CESPA debería reponer las bolsas de los senecanes, y esto no solo no se ha cumplido, sino que progresivamente los sanecanes se van eliminando. Se deja a los vecinos que tienen perros sin una facilidad para recoger sus excrementos y se elimina el elemento educativo que significan. No parece necesario describir el estado del pueblo en esta materia y, por cierto, en Tres Cantos, con la misma empresa de limpieza, funcionan los sanecanes y la propia CESPA incentiva su uso mediante anuncios en prensa.
• Limpieza de pintadas en las paredes. Deberían limpiarse en el plazo de 48 hora. El incumplimiento es manifiesto, no merece más comentario.
• Gastos de información y concienciación ciudadana sobre el tema de los residuos. De acuerdo al contrato CESPA debe gastar anualmente el 4% de su facturación en campañas de información y concienciación, pero nadie recuerda estas campañas a las que debería dedicar ahora 142.000 euros anuales, y 1.380.000 euros desde que arrancó el servicio. Es mucho dinero el que hemos pagado los vecinos por un servicio no recibido lo que nos lleva a preguntarnos por el destino real de esta importante cantidad de dinero.
Tras numerosas gestiones internas hemos logrado una relación de presuntos gastos realizados elaborada por la propia CESPA, lo que implica que desde el Ayuntamiento se carecía de este control. Los conceptos contenidos en la relación entregada, así como su valoración produce sonrojo. Como ejemplo ilustrativo cabe mencionar que se cuantifica en 3.776€ el costo de una persona por cada mañana que durante unas horas atiende a unos niños durante su visita al vertedero de basura. Hay que inflar las cifras para decir que el dinero público efectivamente se ha gastado, pero solo puede hacerse con el consentimiento de las autoridades.
Sorprende que el Partido Popular ante tal descontrol y despilfarro, en cuantías tan importantes, acuse al PSOE de obligar al ayuntamiento a hacer frente a gastos judiciales.
Durante todo un año, el PSOE ha insistido con mociones, ruegos y preguntas en los plenos que se exigiera el cumplimiento del contrato. Ante la nula intención del consistorio por solventar la situación no quedaba más camino que el judicial. Es una afrenta para los vecinos el dinero que se embolsa CESPA y el resultado que está a la vista todos los días en nuestras calles.
Tras retirar la denuncia ante de Tribunal de Cuentas, será ahora a la Fiscalía la que tome cartas en el asunto.
Permanecer impasibles ante una situación como la descrita, después de haberla analizado con profundidad, nos parecería haber realizado una dejación de funciones en nuestra labor de oposición.
Colmenar Viejo 3 de enero de 2017